EXAMEN,VECINDAD,PISO REVERSA.
EXAMEN,VECINDAD,PISO REVERSA.
Este señor se encuentra en un salón de amplios espacios. En los días en que más se ocupa en mostrar esqueletos de animales , esculturas, exposiciones y demás. El hombre que lo examinará es nada más que Moisés Berber aquél maestro y amigo al que no ve hace muchos años. Le sientan en el medio del salón. Una mujer de edad incipiente le entrega un sobre plástico en donde viene números y fórmulas matemáticas que debe resolver si quiere que le den como calificación otro número. Lo toma no sin antes intentar una recriminación mental al puto de Pitágoras. No sabe cúal pudo ser su necedad en aferrarse a que todo en este mundo se rige por números.
El cerebro se le hace ñudos y no da pie con bola. Y no es que sea cosa del otro mundo el saber que dos más dos son siete. Eso cualquiera lo sabe.
Con pluma roja comienza a colocar las respuestas. Piensa que cuando menos pasa el exámen con la panza.
Usted piensa que no todo es culpa de su cabecita hueca sino que también el estado es responsable de los resultados. Debe de haber en México un amplio número de burros y otros asnos.
Después de terminar con su suplicio acude a una vecinad pintada de verde. Ahí un grupo de adolescentes le rodea, le ven como de otro mundo por ser distinto y de ojos claros. Ellos piensan que usted es pichón y le piden marmaja. Mira al más astuto y le toma por el cogote. Luego le dice que quién se cree el pendejo. A mí ningún chamaco caguengue me juega al maldito. El joven al escuchar su fuerza se diluye. Usted sabe que son raza nueva que vive en la pobreza y sin afecto de ninguna clase.
Intenta cambiar la situación y les muestra una moneda que tiene una particularidad.En su En su interior se muestran imágenes que se mueven. Esto le da vida al posedor y además la moneda dicen vale más. Sale del lugar y se la arroja al aire al mismo muchacho que intentó robarle.
Más tarde acude a la casa de su abuela. Ahí está por concluir de colocar un piso. Piensa que ya lo finalizó pero le falta el zoclo. Esto no le importa y piensa que en otro momento lo terminará. Acude Andrés que lleva un pavo extraordinario. Dice que en las fiestas próximas lo preparará que solo le falta comprar especias.
Se percata que necesita un material y le dice a un señor que maneja un Dodge que le lleve. Se sube en la parte trasera y el hombre maneja de reversa. Esta acción es sumamente dificultosa. A punto están de que les peguen de costado. Aún así el hombre no tiene intenciones de manejar de frente.
Regresan pero ya no es la casa de su abuela sino un edificio de departamentos. De uno de ellos sale humo. En el interior se alcanza a ver que alguien prende luces de bengala. Una de ellas cayó y comenzó la quemazón.
Una mujer senil se enoja porque ahora deberá hacer trabajos de limpieza.Usted sentado intenta despegar una cinta de diurex. Dice que servirá para pegarla en los lugares que se quemaron….
Original de Alfredo Arrieta
Para el pueblodetierra.
3 de Noviembre de 2011.
México.
Este señor se encuentra en un salón de amplios espacios. En los días en que más se ocupa en mostrar esqueletos de animales , esculturas, exposiciones y demás. El hombre que lo examinará es nada más que Moisés Berber aquél maestro y amigo al que no ve hace muchos años. Le sientan en el medio del salón. Una mujer de edad incipiente le entrega un sobre plástico en donde viene números y fórmulas matemáticas que debe resolver si quiere que le den como calificación otro número. Lo toma no sin antes intentar una recriminación mental al puto de Pitágoras. No sabe cúal pudo ser su necedad en aferrarse a que todo en este mundo se rige por números.
El cerebro se le hace ñudos y no da pie con bola. Y no es que sea cosa del otro mundo el saber que dos más dos son siete. Eso cualquiera lo sabe.
Con pluma roja comienza a colocar las respuestas. Piensa que cuando menos pasa el exámen con la panza.
Usted piensa que no todo es culpa de su cabecita hueca sino que también el estado es responsable de los resultados. Debe de haber en México un amplio número de burros y otros asnos.
Después de terminar con su suplicio acude a una vecinad pintada de verde. Ahí un grupo de adolescentes le rodea, le ven como de otro mundo por ser distinto y de ojos claros. Ellos piensan que usted es pichón y le piden marmaja. Mira al más astuto y le toma por el cogote. Luego le dice que quién se cree el pendejo. A mí ningún chamaco caguengue me juega al maldito. El joven al escuchar su fuerza se diluye. Usted sabe que son raza nueva que vive en la pobreza y sin afecto de ninguna clase.
Intenta cambiar la situación y les muestra una moneda que tiene una particularidad.En su En su interior se muestran imágenes que se mueven. Esto le da vida al posedor y además la moneda dicen vale más. Sale del lugar y se la arroja al aire al mismo muchacho que intentó robarle.
Más tarde acude a la casa de su abuela. Ahí está por concluir de colocar un piso. Piensa que ya lo finalizó pero le falta el zoclo. Esto no le importa y piensa que en otro momento lo terminará. Acude Andrés que lleva un pavo extraordinario. Dice que en las fiestas próximas lo preparará que solo le falta comprar especias.
Se percata que necesita un material y le dice a un señor que maneja un Dodge que le lleve. Se sube en la parte trasera y el hombre maneja de reversa. Esta acción es sumamente dificultosa. A punto están de que les peguen de costado. Aún así el hombre no tiene intenciones de manejar de frente.
Regresan pero ya no es la casa de su abuela sino un edificio de departamentos. De uno de ellos sale humo. En el interior se alcanza a ver que alguien prende luces de bengala. Una de ellas cayó y comenzó la quemazón.
Una mujer senil se enoja porque ahora deberá hacer trabajos de limpieza.Usted sentado intenta despegar una cinta de diurex. Dice que servirá para pegarla en los lugares que se quemaron….
Original de Alfredo Arrieta
Para el pueblodetierra.
3 de Noviembre de 2011.
México.
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