LA MANO.
Estoy hundido en un sopor. Mi cuerpo está sudándo a mares. Giro de un lado
a otro y puedo ver el rostro de un militar que regresa de la guerra. El se
dirige a la casa en dónde vivió de niño.
La casa está en abandono total. Entra y
todo es ruinas. En el fondo hay un ropero. Lo abre y descubre las ropas de su
padre cubiertas de polvo.
Busca una pluma , arranca un pedazo
de tapiz y escribe que nadie ose robar las ropas de su padre porque lo perseguirá desde el mas allá. Luego sale y
se dirige a la ciudad.
Es confundido con un predicador. Tiene el tipo. Así que piensa en que debe de fundar una iglesia sin
engaños. Es decir una nueva iglesia sin Jesús.
Es tal su idea que la lleva a cabo . Incluso se saca los ojos para sentir
en carne propia que el no es un mentiroso como los demás. No le gusta la
mentira ni la hipocresía de las personas. Ya sabe que todas son falsas, que
todas mientes y que todas roban….
Luego sale a la calle en medio de un aguacero. La dueña de la pensión hundida en su soledad le pide que se case con ella. El
no la escucha y sale. La mujer habla a la policía para anunciar su
desaparición. La policía lo encuentra recostado cerca de unas vías. Lo llevan
para que pague lo que debe. Así a rastras lo depositan de nuevo en su cama. La
mujer senil intenta hablarle pero el ex militar con su mirada azul ya no
responde……
No quiero saber la hora pero un reloj verde me lo anuncia.
La Maga se mete entre las sábanas La
miro y le digo que me espere. Ella me responde que para qué .
Tengo que quitárle las arrugas y las posibles
moruzas. Esto me lo enseñó mi abuela. Ella me dijo un día que su esposo el
General no toleraba ni una arruga en su cama.
Desde entonces se me quedó la manía . Y más con que tú llegues y te
acuestes conmigo. La Maga se espera. Yo con la mano voy planchando todas las
imperfecciones de la sábana. La destiendo y la invito a dormir. La Maga lleva
un camisón con unos bordados en el pecho. Le preguntó sí ella los bordó. No
cómo crees me dice ya lo compré hecho.
Sí es el precio que se tiene
que cubrir. Ya no hacemos nada,
ni nuestra ropa ni nuestra comida…
Somos seres imperfectos que queremos que todo nos sea resuelto sin
complicaciones. Métete ya ¡ Me dice..
Nos acostamos. La Maga me abraza y yo también…. Nos quedamos dormidos.
Horas después ella se levanta asustada
y me dice que algo le camino. Estás soñando es mi respuesta.
No algo me caminó..
Me levanto y pienso que me voy a encontrar alguna chinche. Pero no. Debajo
de las sábanas veo una mano cualquiera que va caminando. No estoy loco porque
la Maga también la mira. Ella tiembla de miedo. La mano sale y se aleja. Se alza sobre el pica porte y se va…
¿ No sería un alacrán Maga?. No era una mano, yo la ví…
Pasado el susto le digo que volvamos a dormir. Ella se vuelve a meter a la
cama, me abraza . Yo le platico una
historia:
Me decía mi mamá que alguna ocasión en Canelas Durango a una mujer
conocida se le murió un hijo. La mujer le lloraba tanto que no lo dejaba
descansar en paz. Tanto así que se le aparecia
a cada rato. Ella acudió al padre del pueblo para platicarle lo que le sucedía. El padre la escuchó en religioso
silencio y le dijo que por mucho que fuera su dolor tenía que dejar descansar
al niño difunto.
Le pidió que acudiera al campo santo. Y esperara pacientemente a que por
entre la tierra saliera la mano del niño intentando regresar al mundo de los
vivos. Cuando esto sucediera ella debería de llevar consigo una vara de membrillo
finamente pulida. Cuando la mano brotara de la madre tierra, ella, la madre
debería darle veinte varazos..
La mujer esperó y espero.
Una noche de lluvia y tempestad y con luna llena. La señora divisó que
por el montículo la mano hizo su
aparción. Buscó la vara y procedió a pegarle tanto que la mano comenzó a
sangrar. Luego escucho gemidos y la mano se ocultó bajo la tierra. El niño
difunto jamás regreso…
La Maga escuchaba atenta pero con miedo. Luego
le dije que será por esa historia que yo
cuando duermo no me atrevo a bajar el
brazo . Siento como sí alguien me la quisiera agarrar.
Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra.
Nec spe, nec metu.
19 de enero de 2013.
Estados Unidos Mexicanos.
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