ORAL, PATIO FILA, ANTONIO.
























Para que ustedes sepan es tanta la mierda que aparece en la televisión que se me metió en la psique.



Me encuentro  en el departamento donde opera la agencia  estadounidense que es la que investiga los delitos a nivel mundial.


Entro. En el lugar hay una mujer de no menos de uno con veinte  de estatura. Ella usa lentes de pasta y unos zapatos de abuela pata.


Le pregunto por la fría. Ella hace un gesto  como diciendo; tengo que encontrar las palabras para explicarle a este lo que pasa.


Se arma de valor, me va diciendo lentamente como para que yo lo asimile.

Me dice que la fría fue mandada a una misión a Afganistán. Una vez ahí contrajo una enfermedad muy delicada.


Le pregunto a la chaparrita ¿ cual enfermedad?


 Se frota las manos y me dice que lamentablemente la fría es  sí una  muy buena agente pero que lo que da al traste con todo es que es una mujer promiscua.

Frunzo  los ojos y le digo con los labios temblando que eso no lo sabía. Pensaba que era yo su único valedor.

Pues no es así. Ella se metió con todos los afganos que pudo.  Uno de ellos o varios le pegaron una especie de purgación.

¿Pero supongo que le estarán dándo antibióticos o algún remedio que alive sus males?.

No es así. Nuestro grupo de científicos pensó que usted tiene la cura en su saliva.

Me arme de valor y le pregunte que era lo que debía hacer.

La mujer me dijo venga, y fui..

Me llevó a una sala. Ahí en una cama se encontraba la fría con las dos piernas levantadas. Miré a la mujer y me hizo un además.  Me acerqué a la fría, ella dormitaba parecía más bien anestesiada. Introduje mi cabeza y comencé a  lamerle el sexo.


En lo que lo hacía pensaba en la traición de esta mujer. Un momento en que me descuido y ya le está abriendo las patas a cualquier afgano.


La fría aún dormida se humedeció, mezclamos fluídos.


La chaparrita miraba. Se acercó y me dijo que debiéramos aprovechar. Se subió a la cama, se levantó la falda. Yo le dije que mejor lo dejáramos para otra ocasión. Ella insistió. Y yo un poco avergonzado me la tuve que echar. Era la jefa..



Ahora me encuentro en un patio.



Es el patio de la casa de un pueblo. Una mujer se da a la tarea de lidiar como con cinco chamaquitos. Yo estoy sentado en una silla de palma. A un lado mío hay una pareja que se acaba de divorciar. Conozco a los dos. Hablamos de cosas sin importancia. De pronto la mujer  al calor de las cervezas me agarra discretamente la mano. Su ex marido está sentado más arriba. Pienso que no está bien que está pendeja me ande aventando los calzones. Se acaban de separar recién. ¿ Andará caliente?.


Intento levantarme , sale la mujer con un niño cargando y una chiche de fuera. Siento que estoy en un sueño de Buñuel


Le digo que me tengo que retirar. La mujer me pide que no me vaya y me entrega otra cerveza.

Me quedo un rato más. Me cruzo de brazos para  que la otra ya no me toque la mano.

De un trago largo me tomo la cerveza goro goro goro goro.glup.

Ahora sí me levanto. Les digo a todos que me voy a Durango.

Al salir hay una pared, en la pared una ventana. Recargo mis brazos, veo una  fila de personas. Se acerca el ex esposo. Me dice que el sabe el santo y seña de todos los que están pasando.  Me mira como diciendo te las voy a platicar..

Pasan, hombres vestidos de charros, otros vestidos de chefs, una mujer panzona a punto de parir. Me dice       que a esa panzona le debería de dar vergüenza, toda la vida se la pasó pariendo chamacos. Le aclaro que la barrigona es mi mamá. Ah? No lo sabía.

Como la número cuatro pasa mi hermana. Me dice el hombre. Esa guera  es musulmana. No jodas. Ella es mi hermana y no es musulmana. Pués se convirtió. Mi hermana lleva el rostro cubierto.

Le doy la mano , me despido y me voy.

Salgo a la calle hay una banda  de viento. Tocan una que no me sé. Me voy caminando hay mucho polvo..



Entro a un cuarto. Pasa el Tony. Le digo es muy bueno verlo porque ahora que se  murió no  me entregó las pinzas que les presté. El Tony se dirige a una caja metálica, comienza a buscar. Saca unas, me las muestra. Le digo que esas no  eran. Sólo te estaba probando. Mete la mano y saca otras. Le digo; esas son. Las tomo, el Tony me dice que saldó su deuda..

Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra
Nec spe, nec metu
10 de junio de 2013,
Estados Undios mexicanos.



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