Puerta azul, mujer impaciente , periódico, casa de rico, tres caminos.
Puerta azul, mujer impaciente , periódico, casa de rico, tres caminos.
Esta puerta era blanca. Va perdiendo su color porque en este sueño he decidido que será azul.
Tomo una brocha la sumerjo en la pintura. Descubro que no es de buena calidad o que el thiner se paso.
Como no tengo un banquito levanto los pies hasta donde puedo y comienzo de arriba para abajo. Así, intento que quede uniforme.
Detrás de la puerta escucho voces. Estas dice que han matado a alguien. Cosa que no me resulta imposible dado que estamos en México y en México la vida no vale ni un cacahuate.
Les voy a decir que quién o qué es el que los mata.
Los mata la infamia,el odio, la carencia de educación, el hambre,la avaricia y la poca madre.
Pero, el caso es que no les voy a decir más. Lo que quiero es terminar de pintar la puerta y que ellos se las arreglen como puedan.
Esta mujer está impaciente. Taconea. Le digo que me espere. No me tardo nada en mostrarle el Reforma. Según me informaron hoy salgo en el periódico.
La mujer hace una mueca de fastidio. Le digo anda anda, no te enojes mujer y espera…
Abro el diario y busco mi colaboración. Una a una recorro las páginas y no encuentra nada. Estoy seguro que mandé a la chica a que depositara la misiva. Ella me dijo que sí lo hizo y que le aseguraron que el día de hoy saldría publicado.
El caso es que no.
La mujer impaciente me dice que se va.
Apresurado me levanto de mi silla y le digo nervioso que sí publicaron estas líneas, son pocas .
Es un tipo que me está suplantando. El no tiene mi cabeza y va a tronar tarde que temprano. Eso te lo aseguro.
A mí no me asegures nada¡
Me grita la gentil, se dirige a la puerta y dá un portazo¡.
Yo me quedo frustrado…
Eso de tratar con mujeres es un reto un enigma y una maraña.
Me informa un consanguíneo que el es rico. Y me lo dice como para echármelo en cara.
Que ya no vive en ningún barrio de clase media o clase baja.
Le escucho como diciendo mira este hijo de puta me viene a restregar en la cara sus bienes como sí a mí me interesara.
Estaría bien que fueras a conocer mi nueva casa. Y como para no hacer las cosas más grandes pues le acompaño.
Vamos por un camino que tiene arreglos, parece que una máquina ha conformado el terreno para que posteriormente le echen pavimento. Es de tarde y viajamos en un carro confortable.
Después de ese camino hay un brazo izquierdo que nos llevará a otro mas. Este camino tiene tierra roja, de tezontle molido. El sol también está rojo. La tarde está languideciendo.
Al término puedo ver que inicia el tercer camino. Este es de lodo. Adelante va una manada de caballos. Claramente puedo ver como los animales meten sus patas entre el zoquetal y siguen avanzando. El carro en el que vamos pasa sin ninguna dificultad.
Ahora veo un río. Enfrente de mí hay muchos niños. Ellos se arrojan al agua. Uno de ellos no calcula y cae en seco sobre una piedras blancas. Este ya se partió los huesos. El niño no llora, se aguanta como los meros machos.
De mi lado hay dos agujeros sobre una piedra. Para llegar a la casa del hombre rico debo de cruzar por alguno.
Por el primero no quepo. Si hiciera tal intento quedaría atrapado. Quién viene detrás me dice que el paso es por el segundo hoyo.
Es un hoyo extraño mitad redondo, mitad cuadrado.
Los hoyos no son todos redondos?
Al intentar pasar por el segundo agujero dos mujeres se meten pecho tierra quitándome mi lugar y sitio.
Les digo que se deben de formar. Ellas no me hacen caso alguno y siguen su rumbo. Las dos me muestran sus calzones.
Al salir veo que la casa del rico no aparece por ninguna parte. Solo veo casuchas, barracas, niños barrigones, lombricientos, sin zapatos. La calle principal también tiene lodo.
Le pregunto a un anciano que me dé señas de la casa nueva.
El anciano agita las manos y me dice que por aquí no hay nada de eso¡
Todos están bien jodidos que no tienes ojos?
Ojos sí tengo .
Pués entonces mira…..
Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra.
Nec spe, nec metu
26 de diciembre de 2014.
Estados Unidos Mexicanos.
Esta puerta era blanca. Va perdiendo su color porque en este sueño he decidido que será azul.
Tomo una brocha la sumerjo en la pintura. Descubro que no es de buena calidad o que el thiner se paso.
Como no tengo un banquito levanto los pies hasta donde puedo y comienzo de arriba para abajo. Así, intento que quede uniforme.
Detrás de la puerta escucho voces. Estas dice que han matado a alguien. Cosa que no me resulta imposible dado que estamos en México y en México la vida no vale ni un cacahuate.
Les voy a decir que quién o qué es el que los mata.
Los mata la infamia,el odio, la carencia de educación, el hambre,la avaricia y la poca madre.
Pero, el caso es que no les voy a decir más. Lo que quiero es terminar de pintar la puerta y que ellos se las arreglen como puedan.
Esta mujer está impaciente. Taconea. Le digo que me espere. No me tardo nada en mostrarle el Reforma. Según me informaron hoy salgo en el periódico.
La mujer hace una mueca de fastidio. Le digo anda anda, no te enojes mujer y espera…
Abro el diario y busco mi colaboración. Una a una recorro las páginas y no encuentra nada. Estoy seguro que mandé a la chica a que depositara la misiva. Ella me dijo que sí lo hizo y que le aseguraron que el día de hoy saldría publicado.
El caso es que no.
La mujer impaciente me dice que se va.
Apresurado me levanto de mi silla y le digo nervioso que sí publicaron estas líneas, son pocas .
Es un tipo que me está suplantando. El no tiene mi cabeza y va a tronar tarde que temprano. Eso te lo aseguro.
A mí no me asegures nada¡
Me grita la gentil, se dirige a la puerta y dá un portazo¡.
Yo me quedo frustrado…
Eso de tratar con mujeres es un reto un enigma y una maraña.
Me informa un consanguíneo que el es rico. Y me lo dice como para echármelo en cara.
Que ya no vive en ningún barrio de clase media o clase baja.
Le escucho como diciendo mira este hijo de puta me viene a restregar en la cara sus bienes como sí a mí me interesara.
Estaría bien que fueras a conocer mi nueva casa. Y como para no hacer las cosas más grandes pues le acompaño.
Vamos por un camino que tiene arreglos, parece que una máquina ha conformado el terreno para que posteriormente le echen pavimento. Es de tarde y viajamos en un carro confortable.
Después de ese camino hay un brazo izquierdo que nos llevará a otro mas. Este camino tiene tierra roja, de tezontle molido. El sol también está rojo. La tarde está languideciendo.
Al término puedo ver que inicia el tercer camino. Este es de lodo. Adelante va una manada de caballos. Claramente puedo ver como los animales meten sus patas entre el zoquetal y siguen avanzando. El carro en el que vamos pasa sin ninguna dificultad.
Ahora veo un río. Enfrente de mí hay muchos niños. Ellos se arrojan al agua. Uno de ellos no calcula y cae en seco sobre una piedras blancas. Este ya se partió los huesos. El niño no llora, se aguanta como los meros machos.
De mi lado hay dos agujeros sobre una piedra. Para llegar a la casa del hombre rico debo de cruzar por alguno.
Por el primero no quepo. Si hiciera tal intento quedaría atrapado. Quién viene detrás me dice que el paso es por el segundo hoyo.
Es un hoyo extraño mitad redondo, mitad cuadrado.
Los hoyos no son todos redondos?
Al intentar pasar por el segundo agujero dos mujeres se meten pecho tierra quitándome mi lugar y sitio.
Les digo que se deben de formar. Ellas no me hacen caso alguno y siguen su rumbo. Las dos me muestran sus calzones.
Al salir veo que la casa del rico no aparece por ninguna parte. Solo veo casuchas, barracas, niños barrigones, lombricientos, sin zapatos. La calle principal también tiene lodo.
Le pregunto a un anciano que me dé señas de la casa nueva.
El anciano agita las manos y me dice que por aquí no hay nada de eso¡
Todos están bien jodidos que no tienes ojos?
Ojos sí tengo .
Pués entonces mira…..
Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra.
Nec spe, nec metu
26 de diciembre de 2014.
Estados Unidos Mexicanos.
Comentarios