Manejando un carro rojo sin frenos,me subo en una vitrina que tiene ruedas y voy a Santiago de Cuba,llevándo cajas de cerveza por Fray Servando Teresa de Mier,Camión con personas indeseables.
Manejando un carro rojo sin frenos,me subo en una vitrina que tiene ruedas y voy a Santiago de Cuba,llevándo cajas de cerveza por Fray Servando Teresa de Mier,Camión con personas indeseables.
Estos parajes no me son del todo desconocidos. Son los años cuarenta. Y queda mucho por construir. Sé que son los meros rumbos de Azcapotzalco. Eso lo digo porque estoy viendo este encierro de caballos finos.
Bueno el caso que me ocupa es este sueño…
Voy manejando un carro Rambler. Sí el carro que le compré al español José Barreiro.
Voy por una calzada recién hecha.
Veo que la luz pasa de ámbar a rojo y me detengo.
En eso se abre la puerta del lado izquierdo y se mete un sujeto. Eso me sucede por no tener precaución y llevar el botón abajo.
Lo miro es Gene Hackman. Me pone una pistola en el costado. Que te pasa Gene? le digo.
Este me responde síguete derecho y vete rápido. Le hago caso. Meto la pata a todo. El carro se desliza veloz como flecha veloz.
Métete por aquí ¡ le hago caso..
Vuelvo a salir pero por otra avenida..
Cuando reconoce más o menos por donde está me pide que me detenga. Meto el pie al pedal del freno pero los frenos no responden.
Que te detengas me grita!
Los frenos no responden Gene?
Intento no pegarle a nada ni a nadie.
Hasta que después de manejar con los huevos en las anginas el carro se detiene por sí sólo.
Gene me dice de nuevo y siempre en tono imperativo que lo siga.
Entramos a una cantina.
Hay dos hombre esperándolo.
Nos sentamos. Los hombres parecen pochos.
Gene les pregunta que sí tuvieron contratiempos?
No nos libramos de todo.
Nadie los siguió?
No nadie..
Está bien. Y ya tienen nuestra parte?
Sí.
El pocho coloca sobre la mesa dos montones de dinero, son en su mayoría dólares.
Gene me mira y me dice secamente: Tomalos son tuyos.. Te los ganaste..
Se levantan los tres y se van.
Gene me dice que nos volveremos a ver.
Se acerca una mesera me pregunta que deseo.
Le digo que sí tiene agua mineral?
Orale señor se va a subir?
Sí espéreme le digo..
Estoy a punto de abordar una vitrina. Sí una vitrina. Estos cubanos son la leche. A todo le encuentran. Sacaron la vitrina de algún negocio porque estaba inactiva, le pusieron ruedas un motor amarrado con ligas , su manubrio de bicicleta y ya está!
Y hacia dónde nos dirigimos les pregunto a los cubanos?.
Todos responden a coro: ¡ Vámos a Santiago de Cuba chico ¡
Y nos vámos pá allá ¡….
El calor es insoportable. Y cargando estas cajas de cerveza pués más..
Lo ideal sería que pasara un camión y quisiera llevarme con este cargamento.
A lo lejos y por Fray Servando viene un destartaládo. Como puedo le insto a que se detenga. Me subo trastabillando porque el señor nunca deja de avanzar.
En un momento le traigo.
Me paso hasta la parte trasera y le digo a Gustavo que va sentado que le pague al chofer. Saco de mi bolsillo muchas monedas de plata. Gustavo me mira y me dice que él puso una parte pero que salió perdiendo.
Está bien ten todas y ya no chingues… Le dejo caer en sus dos manos todas las monedas de plata…
El camión se detiene veo como van subiendo muchísimas personas. Todas ellas tiene rostros indeseables. Vienen sucios, con argollas en la cara, los cabellos con meses sin jabón, sus ropas apestosas. Y lo peor todos vienen drogados.
Se suben los que pueden. Quedo hasta el fondo del camión. Uno de ellos con sus ojos de delito me dice que si le doy una tres equis?
Sí tómala. Te la regalo.
El tipo se agacha, se asoma por su cuello una víbora. El hombre se ríe, me dice que no muerde. Se llama Lola.
Y porque le pusiste nombre de mujer?
Porque crees me pregunta?
Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra
22 de Octubre de 2014.
Nec spe, nec metu
Estados Unidos mexicanos.
Estos parajes no me son del todo desconocidos. Son los años cuarenta. Y queda mucho por construir. Sé que son los meros rumbos de Azcapotzalco. Eso lo digo porque estoy viendo este encierro de caballos finos.
Bueno el caso que me ocupa es este sueño…
Voy manejando un carro Rambler. Sí el carro que le compré al español José Barreiro.
Voy por una calzada recién hecha.
Veo que la luz pasa de ámbar a rojo y me detengo.
En eso se abre la puerta del lado izquierdo y se mete un sujeto. Eso me sucede por no tener precaución y llevar el botón abajo.
Lo miro es Gene Hackman. Me pone una pistola en el costado. Que te pasa Gene? le digo.
Este me responde síguete derecho y vete rápido. Le hago caso. Meto la pata a todo. El carro se desliza veloz como flecha veloz.
Métete por aquí ¡ le hago caso..
Vuelvo a salir pero por otra avenida..
Cuando reconoce más o menos por donde está me pide que me detenga. Meto el pie al pedal del freno pero los frenos no responden.
Que te detengas me grita!
Los frenos no responden Gene?
Intento no pegarle a nada ni a nadie.
Hasta que después de manejar con los huevos en las anginas el carro se detiene por sí sólo.
Gene me dice de nuevo y siempre en tono imperativo que lo siga.
Entramos a una cantina.
Hay dos hombre esperándolo.
Nos sentamos. Los hombres parecen pochos.
Gene les pregunta que sí tuvieron contratiempos?
No nos libramos de todo.
Nadie los siguió?
No nadie..
Está bien. Y ya tienen nuestra parte?
Sí.
El pocho coloca sobre la mesa dos montones de dinero, son en su mayoría dólares.
Gene me mira y me dice secamente: Tomalos son tuyos.. Te los ganaste..
Se levantan los tres y se van.
Gene me dice que nos volveremos a ver.
Se acerca una mesera me pregunta que deseo.
Le digo que sí tiene agua mineral?
Orale señor se va a subir?
Sí espéreme le digo..
Estoy a punto de abordar una vitrina. Sí una vitrina. Estos cubanos son la leche. A todo le encuentran. Sacaron la vitrina de algún negocio porque estaba inactiva, le pusieron ruedas un motor amarrado con ligas , su manubrio de bicicleta y ya está!
Y hacia dónde nos dirigimos les pregunto a los cubanos?.
Todos responden a coro: ¡ Vámos a Santiago de Cuba chico ¡
Y nos vámos pá allá ¡….
El calor es insoportable. Y cargando estas cajas de cerveza pués más..
Lo ideal sería que pasara un camión y quisiera llevarme con este cargamento.
A lo lejos y por Fray Servando viene un destartaládo. Como puedo le insto a que se detenga. Me subo trastabillando porque el señor nunca deja de avanzar.
En un momento le traigo.
Me paso hasta la parte trasera y le digo a Gustavo que va sentado que le pague al chofer. Saco de mi bolsillo muchas monedas de plata. Gustavo me mira y me dice que él puso una parte pero que salió perdiendo.
Está bien ten todas y ya no chingues… Le dejo caer en sus dos manos todas las monedas de plata…
El camión se detiene veo como van subiendo muchísimas personas. Todas ellas tiene rostros indeseables. Vienen sucios, con argollas en la cara, los cabellos con meses sin jabón, sus ropas apestosas. Y lo peor todos vienen drogados.
Se suben los que pueden. Quedo hasta el fondo del camión. Uno de ellos con sus ojos de delito me dice que si le doy una tres equis?
Sí tómala. Te la regalo.
El tipo se agacha, se asoma por su cuello una víbora. El hombre se ríe, me dice que no muerde. Se llama Lola.
Y porque le pusiste nombre de mujer?
Porque crees me pregunta?
Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra
22 de Octubre de 2014.
Nec spe, nec metu
Estados Unidos mexicanos.
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