EN EL LODO, CARRO QUE TIRA LIQUIDO,BARTLETT.



















Justamente estoy recargado en la pared de esa esquina. Fumo un sin filtro. Estoy a la espera de resolver una situación que sí bien me va  , terminará como siempre. Tú o tú podrán clasificarme como un  individuo violento. Puede ser que sí, puede ser que no.

Una camioneta tipo Van, se estaciona en la otra contra esquina un hombre desciende acompañado de varias mujeres. Junto a ella va  mi hija la menor. Debo decirte que la menor tiene en este sueño seis años. Yo tengo 28. Les miró y no entiendo porque este señor tiene asignadas a este grupo de muchachas y entre ella a mi hija. El hombre les dice algo en tono imperativo. A mi hija la jalonea y le arrastra hacia el interior. Yo que soy explosivo en una primera instancia no me dejo llevar por las apariencias y antes que medie explicación alguna y sin importarme las consecuencias me acerco a la puerta después de haberle dado una fumada fuerte a mi cigarro. No sé sí para su mal o para  su mala suerte es el hombre el que me abre.

Sin palabras le meto dos o tres golpes, el hombre cae y se retuerce, en medio minuto ya estoy convertido en fiera.El hombre intenta levantarse y da traspiés. Corre y  lo alcanzo. El cae en un charco lodozo.Ni siquiera  hace intentos por defenderse. Debido a tanto puñetazo  a su cara le comienzan a salir moretones y algún hilo con sangre.

Me levanto e intento limpiarme las manos. No tengo más que mi camisa. Regreso a la casa y vuelvo a tocar. Sale mi hija que  dejó de tener seis años. Es una joven de más de veinte. Le pregunto que es lo que hace con este pendejo. Ella levanta los hombros y me dice que le dieron permiso. ¿ Y quién te debe de dar permiso?  ¿ Quién si no yo?.

Debo calmarme. Por quítame estas pajas ya ando a la greña. No considero que nadie  debe de andar por el mundo cometiendo tropelías. A mí siempre me molestaron las injusticias, la gente gandalla. Y sí está en mis manos resolverlo pués lo seguiré haciendo, no lo puedo impedir….




Me dice un señor que el carro que traigo está tirándo aceite. Me pide que me agache para que vea la anomalía. Como si fuera un perrito me asomo y veo la gota constante… Es mucha. A este paso el carro  puede desvielarse. ¿Entonces que hacemos?. Debemos hacerle varios arreglos. Le digo que los haga.


Se aparece Bartlett. Con su cara de no confianza comienza decirme que el automotor debe de rectificarse.. Aja?.Quién debe de rectificar es usted mi estimado licenciado. Debe de ser horrible que a alguna gente se le pierda la confianza. Y usted desde hace mucho carece de ella. El hombre me mira con ojos de dardo y se va.

Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra.
Nec spe, nec metu.
15 de Agosto de 2012.
Estados Unidos Méxicanos.


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