Edificio milenio..
Edificio milenio..
A veces quisiera estar y no estar, salir y escaparme, huir y largarme a veces quisiera alejarme y no volver. Pero quiero y no quiero, debo y no debo… Entonces qué hago? Me voy me quedo? Me retitro o me alejo. Me quedo quieto o me muevo?
Me asomo al interior de este edificio. Es un edificio de cristal y hierros.. Un rascacielos pues.
Entro.
Una mujer que parece secretaria de Orson Welles me pregunta que a dónde voy?
Voy a donde las aves escapan..
Y donde es eso me pregunta?
Por allá¡ Y le señalo con el dedo un punto.. Un punto en las alturas..
La mujer ya no me dice nada y comienza a subir esta escalera en caracol. Es una escalera de un tipo de mármol verdoso, un mármol bien trabajado. Piso suavemente.
De una puerta sale un hombre gordo vestido de traje negro. Es un traje que le queda chico. Veo sus manazas. Me mira y me dice que no puedo subir.
Señorita¡
Que señorita ni qué nada¡
Salte me grita.
No le hago caso alguna y comienzo a correr.
El gordo enfadado corre tras de mí.
Soy más ágil¡ Alcánzame sí puedes wuey.
Subo las escaleras como gamo. El hombre me grita improperios. Pienso que sí me alcanza hasta me golpeará.
Llegó a la mitad del edificio.
La fría se aparece. Ella lleva un abrigo lila. Me dice: Ven Alfredo¡ correle. Métete aquí.
Entro a un cuarto. Hay olores de solventes, una Cocacola a medio llenar, brochas, escobas, botes con clarasol y trapos que apestan.
Llega el gordo y le pregunta insolente a la fría que para dónde me fui?
La fría le dice que por allá y le señala un sentido opuesto.
El gordo sigue la ruta.
La fría abre la puerta y me dice: rápido rápido que este señor te mata.
Salgo para encontrarme con un perro bóxer.
Estos perros me dan susto fría.No hacen nada.
Eso es lo que tú dice pero yo tenía uno de estos perros en Guanajuato . Era un perro muy calmado. Hasta que una tarde sin más ni más le pepenó la pierna a un niño y se la desgarró.
Entonces bajé apresurado del piso segundo de la casa. Y eso porque estaba viendo la telenovela con Amparo Rivelles. Bajé y vi al perro chato pepenado de la pierna del niño. Le grité: quítate pinche chato¡ Y el chato caso que me hacía. Entonces lo agarré del cuero del lomo y a huevo lo quité. El perro enfurecido tiraba mordidas para todos lados y echaba espuma. Yo no estaba dispuesto a que el perro mordiera más al niño y le metí además unos buenos chingadazos y sus patadas respectivas.
Sí Alfredo están bien tus historia pero ya vámonos.
Sí no es una historia fría eso sucedió en verdad. Y mira que te lo digo yo.
Bajamos por la escalera de mármol verde.
No entiendo que esto es un sueño y a pesar de lospeligros y desaveniencias de la vida todavía tengo tiempo de acordarme de poema catalán de Josep Palau :
Voy como las aves cuando ha perdido el hijo,
que giran sin tener consuelo,
con gritos de sangre alertan , son bandada
como si el mundo entrara en gran peligro.
Se giran sin desfallecimiento
entorno del lugar donde el hijo han dejado
y no les asusta la veracidad
porque los daría mucho mayor tormento.
Desde la mañana hasta que se ha puesto el día,
con sueño inquietan el espacio,
dicen que en ellos dolor no se pondrá nunca,
por cuanto nunca más tendrán el hijo entorno.
Sólo por la noche, vencidos por el derribo,
vuelven al nido como a torre desierta
sienten el corazón de repente oscuro y viejo
y se adormecen en un sueño de piedra.
Y así siempre con un volar penoso,
abandonando el nido, el árbol y el río,
van en pos de un lugar más penoso:
pero en ningún lugar el su niño vive.
Así yo voy , perdido de mí mismo,
a mí mismo buscándome eternamente.
Mas yo soy mudo y mudo mi lamento,
y garganta adentro mi dolor se apacienta.
A la mitad del edificio estábamos porque nunca pudimos llegar al piso superior cuando se terminó el barandal.
Y ahora qué vanos a hacer fría?
Nos aventamos al precipicio?
Así se han matado muchas actrices gringas. Se avientan por las escaleras y ahí se termina la película.
No mira ven . La fría me toma de la mano y con precaución intentamos bajar. El caso es que lo logramos.
Hay una puerta trasera.
Parece que el voluminoso no nos sigue o no nos ha encontrado.
Pero que le quita al wey que yo quiera ver el edificio por dentro?
No le quita nada¡
Una mujer trae una carreola. En la carreola lleva tres gatitos y un bebé de meses.
Todos van dormidos…
Al salir veo que en el mostrador que asegura que el edificio se llama Milenio.
Tendrá mil años que lo construyeron? No lo sé por que no tiene fecha..
El obeso nunca nos pudo atrapar…
Bueno a mí que yo era su principal..Objetivo.
Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra
nec spen nec metu
18 de Abril de 2015.
Estados Unidos Mexicanos.
A veces quisiera estar y no estar, salir y escaparme, huir y largarme a veces quisiera alejarme y no volver. Pero quiero y no quiero, debo y no debo… Entonces qué hago? Me voy me quedo? Me retitro o me alejo. Me quedo quieto o me muevo?
Me asomo al interior de este edificio. Es un edificio de cristal y hierros.. Un rascacielos pues.
Entro.
Una mujer que parece secretaria de Orson Welles me pregunta que a dónde voy?
Voy a donde las aves escapan..
Y donde es eso me pregunta?
Por allá¡ Y le señalo con el dedo un punto.. Un punto en las alturas..
La mujer ya no me dice nada y comienza a subir esta escalera en caracol. Es una escalera de un tipo de mármol verdoso, un mármol bien trabajado. Piso suavemente.
De una puerta sale un hombre gordo vestido de traje negro. Es un traje que le queda chico. Veo sus manazas. Me mira y me dice que no puedo subir.
Señorita¡
Que señorita ni qué nada¡
Salte me grita.
No le hago caso alguna y comienzo a correr.
El gordo enfadado corre tras de mí.
Soy más ágil¡ Alcánzame sí puedes wuey.
Subo las escaleras como gamo. El hombre me grita improperios. Pienso que sí me alcanza hasta me golpeará.
Llegó a la mitad del edificio.
La fría se aparece. Ella lleva un abrigo lila. Me dice: Ven Alfredo¡ correle. Métete aquí.
Entro a un cuarto. Hay olores de solventes, una Cocacola a medio llenar, brochas, escobas, botes con clarasol y trapos que apestan.
Llega el gordo y le pregunta insolente a la fría que para dónde me fui?
La fría le dice que por allá y le señala un sentido opuesto.
El gordo sigue la ruta.
La fría abre la puerta y me dice: rápido rápido que este señor te mata.
Salgo para encontrarme con un perro bóxer.
Estos perros me dan susto fría.No hacen nada.
Eso es lo que tú dice pero yo tenía uno de estos perros en Guanajuato . Era un perro muy calmado. Hasta que una tarde sin más ni más le pepenó la pierna a un niño y se la desgarró.
Entonces bajé apresurado del piso segundo de la casa. Y eso porque estaba viendo la telenovela con Amparo Rivelles. Bajé y vi al perro chato pepenado de la pierna del niño. Le grité: quítate pinche chato¡ Y el chato caso que me hacía. Entonces lo agarré del cuero del lomo y a huevo lo quité. El perro enfurecido tiraba mordidas para todos lados y echaba espuma. Yo no estaba dispuesto a que el perro mordiera más al niño y le metí además unos buenos chingadazos y sus patadas respectivas.
Sí Alfredo están bien tus historia pero ya vámonos.
Sí no es una historia fría eso sucedió en verdad. Y mira que te lo digo yo.
Bajamos por la escalera de mármol verde.
No entiendo que esto es un sueño y a pesar de lospeligros y desaveniencias de la vida todavía tengo tiempo de acordarme de poema catalán de Josep Palau :
Voy como las aves cuando ha perdido el hijo,
que giran sin tener consuelo,
con gritos de sangre alertan , son bandada
como si el mundo entrara en gran peligro.
Se giran sin desfallecimiento
entorno del lugar donde el hijo han dejado
y no les asusta la veracidad
porque los daría mucho mayor tormento.
Desde la mañana hasta que se ha puesto el día,
con sueño inquietan el espacio,
dicen que en ellos dolor no se pondrá nunca,
por cuanto nunca más tendrán el hijo entorno.
Sólo por la noche, vencidos por el derribo,
vuelven al nido como a torre desierta
sienten el corazón de repente oscuro y viejo
y se adormecen en un sueño de piedra.
Y así siempre con un volar penoso,
abandonando el nido, el árbol y el río,
van en pos de un lugar más penoso:
pero en ningún lugar el su niño vive.
Así yo voy , perdido de mí mismo,
a mí mismo buscándome eternamente.
Mas yo soy mudo y mudo mi lamento,
y garganta adentro mi dolor se apacienta.
A la mitad del edificio estábamos porque nunca pudimos llegar al piso superior cuando se terminó el barandal.
Y ahora qué vanos a hacer fría?
Nos aventamos al precipicio?
Así se han matado muchas actrices gringas. Se avientan por las escaleras y ahí se termina la película.
No mira ven . La fría me toma de la mano y con precaución intentamos bajar. El caso es que lo logramos.
Hay una puerta trasera.
Parece que el voluminoso no nos sigue o no nos ha encontrado.
Pero que le quita al wey que yo quiera ver el edificio por dentro?
No le quita nada¡
Una mujer trae una carreola. En la carreola lleva tres gatitos y un bebé de meses.
Todos van dormidos…
Al salir veo que en el mostrador que asegura que el edificio se llama Milenio.
Tendrá mil años que lo construyeron? No lo sé por que no tiene fecha..
El obeso nunca nos pudo atrapar…
Bueno a mí que yo era su principal..Objetivo.
Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra
nec spen nec metu
18 de Abril de 2015.
Estados Unidos Mexicanos.
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