ESCUELA, RENACIMIENTO, MUJER BRUJA,  TORO SUELTO
























El acude a  aquella escuela en donde  estuvo con anterioridad. Tiene un problema a resolver. Debe dividir diez manzanas entre dos personas. Siempre que lo intentaba  su mente entraba en una enorme laguna. Una laguna gris..


Lo recibió Guillermo que en la realidad tenía otro nombre. Y digo tenía hasta que lo mataron a balazos. Una tarde entraron dos hampones  a una miscelánea  que Guillermo atendía. El estaba en la casa, en el mostrador su joven hijo. Entraron dos de inmediato lo amagaron, le exigieron que entregara el dinero. El joven no lo quiso hacer y comenzaron a forcejear. Al escuchar gritos Guillermo entró, los dos sujetos le dispararon a quemarropa.


Guillermo le pide dos documentos. El le dice que tiene que acudir a las escuelas en donde estuvo a requerir los dichosos papeles.


Sale del lugar y mira una puerta pintada de verde. La abre y de inmediato y sin más trámite se encuentra en el renacimiento. Hay una muchedumbre. Un hombre vestido con una especie de faldón y sandalias amarradas a las piernas le mira. El se acerca y le pregunta como llega  a la escuela en donde imparten artes. El señor hace un gesto como tratando de adivinar en que sitio se encuentra el centro escolar. Le responde que tiene que subir esa calle y posteriormente atravesar la loma.


Así lo hace. Llega  a la loma. De primera instancia sabe que es una distancia enorme. Se para erguido, le salen de la espalda alas. Las bate y comienza a subir  verticalmente, luego se va inclinando y vuela. Sus ojos miran el paisaje. Piensa que es Italia, los hombres y las mujeres tienen el tipo.


Veinte minutos después encuentra el sitio, comienza a volar como ave, gira despacio y baja hasta posarse suavemente en el piso. Camina. Pregunta a dos ancianas sí ese es el centro cultural. Sí le responden en latín.
El entra. Busca un lugar, se sienta en los pupitres de adelante.  Hay siete alumnos. Cada uno de ellos lleva una espada.

Se acerca un maestro. Le pregunta al primero par qué quiere esa espada. El joven la blande, pero la espada se fragmenta en  pedacitos de piedra. Luego lo hace con el segundo. Alza la espada. La espada   se disuelve como sí de arena se tratara. Más tarde se dirige al tercero. El tercero empuña el acero. El acero se cristaliza y también se desmorona.

Por último le pregunta a el. El dice que tiene un problema. Quiere saber como repartir diez manzanas entre dos personas. El maestro le dice la espada te lo dira : El  sujeta la espada con fuerza y le da un fuerte tajo a la mesa. Hay diez manzanas, las manzanas saltan y quedan cinco en cada extremo de la mesa.

Una vez  aprobado el curso el maestro le dice que debe de ir a buscar a la mujer de la cueva. Le dice que no olvide la espada.

Camina por tres horas. Se interna en un bosque. Aparece la cueva. Hay un individuo de bigotes largos, ¿ él le pregunta sí esa es la cueva  de la mujer?. Sí la mujer es una bruja.
Todavía no acaba de de terminar la frase cuando se aparece  una mujer de un metro con cincuenta. Va vestida de negro, se cubre la cabeza con una mascada negra. Tiene además una nariz prominente, como de águila.


El le  dice que le explicaron que fuera a buscarla. La mujer bruja responde enojada que ella nunca  le dirá como repartir diez manzanas entre dos personas. Actos seguido se echa a correr con la clara idea de subirse a su escoba. El la alcanza, la toma  por el cuello y caen. La mujer opone resistencia, él la pepena por el cuello. La cara de la mujer se alarga, su piel se hace blanda. El la cubre y trata de asfixiarla, la mujer se retuerce, se queda sin aire y muere después de estirar las dos piernas.

Son casi las cinco de la madrugada. Ahora va en un taxi por San Juan de Letrán. Una enorme algarabía se escucha. Parece que  habrá una fiesta charra.

Hombres vestidos a caballo avanzan sobre la banqueta, lo mismo hacen bella damas, son  amazonas de Jalisco. También les acompañan más allá un grupo de chiquillos que van sin camisa y trepados en briosos cuacos.

Por una calle aledaña sale un toro de enormes astas. El toro esta engentado y quiere cornar al que se pueda. El toro echa babas y  bufa. Unos señores que viajan con usted le  dicen que el toro quiere matar a algunos, siempre lo hace. Cada vez que hay fiesta el toro sale y mata a varios.




Pasan por el cabaret  al que usted iba, que buenas putas por Dios. Le dice al señor que  en el carro se va cómodo , si estuviera en la calle también correría para escapar del toro.


Hay mucha gente en el mundo, Si se mueren unos cuantos pués ni se nota.

El hombre le pide al taxista que se pare porque va a bajar. Le paga. A él le entrega una bolsa, le dice que son diez manzanas que repartidas entre  dos personas les tocan cinco a cada uno.

Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra
Nec spe nec metu
30 de mayo de 2013

Estados Unidos mexicanos.



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