Recogiendo cosas, sacándo sangre.























No le encuentro caso estar acomodando cosas en estas cajas pero ni modo que me las lleve tanto trasto de uno en uno. Es sorprendente mirar cuanto puede acumular una personas somos como una especie de ratas cambalachistas una vez que llené las cajas  me dirijo al baño para lavárme las manos con detergente por suerte yo no soy como Howard Hughes   que entró en una especie de locura pendeja este archi rico pensaba que  de ninguna manera sus orines se podrían mezclar en ninguna cloaca así que utilizaba botellas para mearse  tenía su habitación repleta de botellas con orines  son las manías de algunos digo yo a mí me basta solamente con lavárme las manos antes de comer o mirar que las tengo sucias pero lavártelas a cada rato como sí  estuvieran mugrosas y las tuvieras limpias es de gente loca parece que ya terminé debo de apurarme  tengo que ver a una maestra que me avisan cayó enferma   para ponerlos en situación es mi maestra Marta sí la maestra que tuve en el jardín de niños todavía la recuerdo con su vestido floreado y entregándome mi diploma yo vestido de blanco impecable  aún recuerdo los zapatos blancos y cómo mi mamá me ponía vaselina en el cabello bueno la maestra se encuentra acostada en la cama de mi tío Lalo  entra un doctor y le dice que tiene que  conseguir  sangre de su tipo pero  se le está complicando debido a que el tipo de  ella es  raro Fernando  se ofrece pero les dice que primero revisen  cual es su tipo ya que según él sí a a alguno le pones sangre que no sea la adecuada entonces hace chiras y chiras pelas Fernando les muestra un brazo es ahí que le veo una escoriación creo o me parece que ya le han sacado mucha sangre y ahora una mas bueno así lo quiere además es para una causa noble ayudar a la maestra en  alguna ocasión  cuando mi padre estaba en el hospital los doctores solicitaron que los familiares fueran a  donar así que  bajé al sótano que era en dónde estaba el banco al verme la mujer me pregunto que sí iba  a hacer alguna donación pensé esta está pendeja sí vengo al banco de sangre no es para donar esperma o sí bueno la mujer me  preguntó qué cuantos kilos pesaba le respondí y de vuelta me explicó que tenía poco peso y que esa era una condición para no poder ser donador bueno yo tuve la intención y sí no se puede  pués no se puede y ya 

Más tarde un señor tenía la urgencia de llamar por teléfono para que le autorizaran un crédito incluso pude escuchar la voz de una bancaria decirle que por su buena administración se le había otorgado un crédito de cien pesos   al parecer el señor no quedó conforme porque con esa cantidad no llega  ni a Toluca y según dijo tenía que acudir a Saltillo a comprar dos pistolas calibre 44 y para qué quiere usted las pistolas le pregunto mi tío pués para qué para matar gente para esos son las armas mi mamá entró a la habitación en dónde estaba la maestra Marta al verla la maestra le dijo que  la felicitaba por haber tenido esta clase de hijos yo pensé porque me echa porras sí yo no le dí sangre ni conoce  mi historia pero en fin.




Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra
Nec spe nec metu
8 de septiembre de 2013
Estados Unidos Mexicanos




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