SEÑORAS BRUJAS, PASTO SINTETICO, ARTISTAS PLASTICOS..
SEÑORAS BRUJAS, PASTO SINTETICO, ARTISTAS PLASTICOS..
El sueño del 25 fue:
Estoy en un edifico pintado de amarillo y rojo escarlata. La parte de abajo es como un almacén de muebles. No tengo intención de comprar nada pero ahí estoy.
Miro a través de un aparador. Una mujer de nalgatorio descomunal , narices amplias y piel negra me dice con sus gestos que pase al interior. No sé cuales son sus pretenciones. Yo que no soy medido y atraído hasta cierto punto por sus nalgas duras penetro por una puerta líquida . La mujer se aproxima , me huele . De inmediato se pueden percibir que sus feromonas, son intensas. Esta negra me digo yo ha de querer. Me ofrece un vaso con ajenjo y lo bebo hasta la última gota. Mi cabeza se marea, comienzo a ver imágenes de cuando era niño. De cuando manejé una bicicleta y me quedé con el manubrio en las manos, se zafó.
Me pide que me recueste en un camastro, hay humo en la habitación, comienza frotarme suavemente mientras entona un canto extraño para mí. La mujer se despoja de sus ropas y se trepa. Sigue en trance. Sus ojos se encuentran en otra parte. No sé si sus pensamientos también. Descubre un tatuaje que tengo. Es un halcón con las garras extendidas. Abre sus piernas gordas y de cuajo inserta mi miembro que no es por dártelo a desear pero siempre me lo han chuleado. La mujer se mueve y hierve. Por mi parte sudo como nunca lo había hecho. Puedo ver su rostro en el mismo momento que tiene su orgasmo.
Abre los ojos y me dice que ya hizo su deber. Mira un pizarrón y certifica su tarifa de bruja del talón.
Me levanto y le pago doscientos del águila. Me voy relajado y cómo nó, esta bruja trabaja bien……
Después de este ajetreo aparezco en aquella mi querida Secundaria que hoy está en el abandono. Anteriormente el patio era de cemento. En esta ocasión del sueño tiene pasto sintetico. Con una navaja hago unos cortes y cuando tengo dos metros y medio, corto. Agachado comienzo a envolver hasta hacer un rollo. Antes de salir tengo que avisarle a Jorge Pineda Lugo. Me asomo y le puedo ver en charla con varias personas. A través del vidrio descubro que los rostros de Alberto Vázquez y los Hermanos Carrión me reconocen a pesar de que en la vida real nunca tuve el gusto. Sus caras emiten sonrisas de agrado era como si me conocieran de toda la vida.
Uno que se llama Lalo abre la puerta y me dice que pase. Jorge Pineda me pregunta como siempre lo hacia. Sobre cual era mi asunto?. Le dije al maestro que había recortado pasto del patio y que si me lo podía llevar.
Pues ya qué joven si ya lo cortó. ¿ Pero que hará con el pedazo descubierto ?. Le dije que pensaba colocar una flores sintéticas. Haga lo que quiera pero no lo deje así.
Ahora las personas que hablaban con Jorge cambiaron su aspecto. Eran muñecos de algún plástico. Incluso las muecas que hacían eran forzadas. Alguien les pinto las cejas. Comenzaron a hablar de manera ñoña. Me explicaron que en esta vida a las personas de carne se les trata mal, imagínate tú a nosotros que somos muñecos. Uno de ellos se sentó para intentar colocarse unas de sus piernas. Entonces extendí el pasto que ya llevaba y le pedí al muñeco que se recostara. Así lo hizo, se durmió profundo………
Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra.
26 de diciembre de 2011.
Nec spe, nec metu
Estados Unidos Mexicanos.
El sueño del 25 fue:
Estoy en un edifico pintado de amarillo y rojo escarlata. La parte de abajo es como un almacén de muebles. No tengo intención de comprar nada pero ahí estoy.
Miro a través de un aparador. Una mujer de nalgatorio descomunal , narices amplias y piel negra me dice con sus gestos que pase al interior. No sé cuales son sus pretenciones. Yo que no soy medido y atraído hasta cierto punto por sus nalgas duras penetro por una puerta líquida . La mujer se aproxima , me huele . De inmediato se pueden percibir que sus feromonas, son intensas. Esta negra me digo yo ha de querer. Me ofrece un vaso con ajenjo y lo bebo hasta la última gota. Mi cabeza se marea, comienzo a ver imágenes de cuando era niño. De cuando manejé una bicicleta y me quedé con el manubrio en las manos, se zafó.
Me pide que me recueste en un camastro, hay humo en la habitación, comienza frotarme suavemente mientras entona un canto extraño para mí. La mujer se despoja de sus ropas y se trepa. Sigue en trance. Sus ojos se encuentran en otra parte. No sé si sus pensamientos también. Descubre un tatuaje que tengo. Es un halcón con las garras extendidas. Abre sus piernas gordas y de cuajo inserta mi miembro que no es por dártelo a desear pero siempre me lo han chuleado. La mujer se mueve y hierve. Por mi parte sudo como nunca lo había hecho. Puedo ver su rostro en el mismo momento que tiene su orgasmo.
Abre los ojos y me dice que ya hizo su deber. Mira un pizarrón y certifica su tarifa de bruja del talón.
Me levanto y le pago doscientos del águila. Me voy relajado y cómo nó, esta bruja trabaja bien……
Después de este ajetreo aparezco en aquella mi querida Secundaria que hoy está en el abandono. Anteriormente el patio era de cemento. En esta ocasión del sueño tiene pasto sintetico. Con una navaja hago unos cortes y cuando tengo dos metros y medio, corto. Agachado comienzo a envolver hasta hacer un rollo. Antes de salir tengo que avisarle a Jorge Pineda Lugo. Me asomo y le puedo ver en charla con varias personas. A través del vidrio descubro que los rostros de Alberto Vázquez y los Hermanos Carrión me reconocen a pesar de que en la vida real nunca tuve el gusto. Sus caras emiten sonrisas de agrado era como si me conocieran de toda la vida.
Uno que se llama Lalo abre la puerta y me dice que pase. Jorge Pineda me pregunta como siempre lo hacia. Sobre cual era mi asunto?. Le dije al maestro que había recortado pasto del patio y que si me lo podía llevar.
Pues ya qué joven si ya lo cortó. ¿ Pero que hará con el pedazo descubierto ?. Le dije que pensaba colocar una flores sintéticas. Haga lo que quiera pero no lo deje así.
Ahora las personas que hablaban con Jorge cambiaron su aspecto. Eran muñecos de algún plástico. Incluso las muecas que hacían eran forzadas. Alguien les pinto las cejas. Comenzaron a hablar de manera ñoña. Me explicaron que en esta vida a las personas de carne se les trata mal, imagínate tú a nosotros que somos muñecos. Uno de ellos se sentó para intentar colocarse unas de sus piernas. Entonces extendí el pasto que ya llevaba y le pedí al muñeco que se recostara. Así lo hizo, se durmió profundo………
Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra.
26 de diciembre de 2011.
Nec spe, nec metu
Estados Unidos Mexicanos.
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