GLOBOS, PREMIO, CERDOS SERVILES AL DINERO

GLOBOS, PREMIO, SERVILES AL DINERO.




Lleva entre las manos un globo de color azul. Dentro de este hay un papel que se mueve. El globo debe de tener gas porque siempre enfila para lo alto. Usted sabe que en ese globo va implícita una fortuna que le hará cambiar desde sus aspecto horrible hasta parecer señor. Con un ademán llama a la fría y le dice que de ahora en adelante se acabaron las estrecheces. Le dice señalando la bola plástica que ahora que lo sepan se arrastrarán peor que víboras y le lamerán los zapatos.


Por estar eufórico por este poder adquirido abre las manos y el globo se va se va….


Al ver perdidas su posibilidades de someter a los otros, corre sin perder la ruta del globo. Se agita motivado por los aires. Gira y gira y cada vez se eleva golpeando los edificios y las ventanas.


Debe de haber sido por tanta vuelta que ahora el globo se convirtió en un envase de agua Bonafont de tonos rosas . Es un envase grande que no ha perdido las propiedades de volar. Descubre que aún sigue el papel de la fortuna. Un grupo de personas intentan tomarlo pero fracasan en su intento. Por último el envase que anteriormente era globo topa con el barandal de un puente. Ahí se le ocurre pasar a un hombre mestizo de pelo negro. De momento le sorprende pero logra agarrarlo. Usted llega y le dice que ese envase es suyo.


El mestizo le dice que compruebe que le pertenece. Sin más preguntas saca de su bolsillo un papel que es una contraseña. Ahí hay un número coincidente. El señor no tiene más que entregárselo. Las personas que corrieron por el otro extremo llegan y de inmediato se ponen a sus órdernes. Pinches serviles.


Va y cobra ese premio. Es tal la fortuna que el puto de Mubarak es nada con lo que ahora recibe.

Ahora se encuentra recostado en un camastro cómodo de sábana blanca. La fría elabora una agenda para que las gentes le vaya externando sus deseos. Los mira y dilucida.

Una mujer que antes le negó el alimento ahora se dice dispuesta a servirle. Usted la mira y le dice: Enseñales el culo a todos los que pasen. Así lo hace. Vieja servil no vale nada.

Entra otro y le pide lamerle los zapatos. Sin esperar más le arroja un peso y le dice: Este es tu valor hombre de mierda.

Luego de tres horas la fila es interminable. Le dice a la fría que los mande a todos a la chingada. Ya no está para ver caras de gente hipócrita. La fría no dice nada y los despide.

Sale y mira a su abuela que entra a una tienda en donde venden electrodomésticos. La pierde de vista. Se acerca una mujer que le intenta vender una televisión de enormes dimensiones. Es para ver mejor la guerra y los disturbios. A todo color. Hasta la sangre se puede ver….

Los ojos de esta mujer llevan su dosis de avaricia. No puede ser. No hay hombres justos. La avaricia es lo que priva. Se les mira en los ojos las ganas inmensas del saqueo, la rapiña y el hurto. Esa es la raza humana….



Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra.
Nec spe, nec metu.
22 de febrero de 2011.
Estados Unidos Mexicanos.