PANTALON DE PAPEL, MUJER FLACUCHA ABANDONADA.


























En pocas ocasiones tengo que hacerla de payaso.


Una mujer me dice que debo de salir a entretener a un número suficiente de personas que esperan sentadas y paradas mi presencia.


Le digo que me espere. Miro en el mayor de los fracasos que no tengo siquiera un traje apropiado de payaso. Solo hay sobre la cama un pantalón de papel. Lustre.

Donde debe de llevar las valencianas le pusieron una especie de olanes, también de papel…


No tengo para dónde hacerme así que hago de tripas corazón y salgo..

La gente al verme comienza a aplaudir como sí yo fuera un mono. Esto hace que despierte mi orgullo. Paso entre ellos y me marcho.

Los presentes se quedan sorprendidos de mi actitud y de mi desplante.



Abro una puerta y comienzo a caminar….

Luego abro otra :


Hay una mujer flacucha, de aspecto cadavérico. Tiene sobre los ojos una máscara de trapo negro. Le digo que ya llegué. La mujer tiene sobre las piernas unas hojas. Al saber de mí comienza a hablar, luego estalla en llanto.



Me dice  casi ahogada que Alvaro la abandonó. Y como nó. A las mujeres siempre les pasa. Se van poniendo feas, flacas horrendas . Como es su caso. Ella me dice que no con el dedo de la mano y sigue llorando. Acéptelo remedo de budista . Usted podrá decir lo que quiera pero el caso es que usted está más  fea que una patada en los huevos , horrenda y vieja. Es la realidad y contra la realidad nada.


Es posible que el Alvaro haya encontrado en el camino a una joven de senos erectos. Se le encendieron los ánimos y se marchó..


La mujer al verme tan claridoso me pide que me vaya. Antes de hacerlo se asoma Don Ramón. Nos pide a todos que sí no nos gusta el programa que hacen pués que por favor no lo digan en público.

Yo lo ignoro. ¿Y este? ¿ Quién se cree para darme órdenes?.....

Me acaba de entrar una hambre de aquellas. Me informa  un señor que por Jalapa Veracruz hay un restaurante especializado en mariscos. Que son los mejores de México. Así que abro otra puerta y llegó al restaurante.

Un hombre lleva una cubeta de lámina hasta el borde de agua. En  el interior nada una galleta salada.

El hombre no se percata pero el agua bambolea. El agua me moja. Me moja el pantalón .



 Como la prenda es de papel esta comienza a deshacerse. Se me cae a pedacitos. Me quedó encuerado por partes.

 En dónde se me vé la piel me pongo pedazos de papel. Salgo a la calle sin comer. Ahora mi preocupación es que no se me vea el culo… No sé cómo hacerle…


Original de Alfredo Arrieta
Para el pueblodetierra.
Nec spe, nec metu.
23 de enero de 2013
Estados Unidos Mexicanos.




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