EL DARDO.





EL DARDO.


Usted se encuentra en el punto del sueño, en el lugar en que todo es disparate. Afuera en la calle de tierra, se escuchan los ladridos de una jauría. Están enojados por la presencia de algún extraño. En la altura la luna alumbra en plenitud.


Un hombre intenta forzar la puerta que se detiene con una aldaba. Al ver fracasados sus intentos le tira dos o tres patadas y la puerta sucumbe ante tal fuerza.

Posteriormente abre la que da precisamente a su recámara. Esta vez usted se mira sin camisola. No se la puso encima por estar distraído en la necesidades del gato.
El hombre con aspecto de Tepaneca se detiene enfrente de su camastro. Sin decir palabras acciona un botón. Lleva entre las manos una manguera como esas que usan los albañiles para medir los niveles . En la punta principal de esa manguera lleva un dardo parecido a una flor margarita.


A la manera de los indígenas venezolanos sopla y le clava el dardo en medio del pecho. Usted mira que este punzón comienza a girar. El hombre hace lo mismo con los demás miembros de la familia.


Se levanta y en calzones le pregunta por la razón del disparo. Su respuesta fue que le ordenaron de la presidencia. Cada persona que habite el municipio deberá ser activado con la sustancia del dardo. No se enoje, es solamente una sustancia para que usted piense y hable en inglés. Al sentirse usado intenta reclamarle al Tepaneca pero este sale tan rápido que le pierde de vista.


Al darse cuenta de la violación a sus derechos a elegir cual es el idioma que usted debe de hablar. Busca a un funcionario municipal que casualmente pasa por el lugar.
Le informa sobre este atropello y el burócrata sonríe como diciendo; se le está dando la posibilidad de expresarse y deje de hablar como indito y este nos rechaza.
Mire señor. Va y le dice al munícipe que le doy las gracias infinitas por su preocupación para que las personas tengan otros modos de expresarse. Y ya estoy tan avanzado que puedo decir al impositivo : fuck your mother sucks cocks. El hombre no haya que decir. Y se limita a cerrar los ojos….


Con un nuevo idioma en su ser se dirige a la zona alejada del aeropuerto. Ahí le dicen que deberá quitar una aeronave de su propiedad. Es un avión de la guerra pasada. Intentaba convertirlo en restaurante pero la falta de dinero ha sido el impedimento. Le dice a unos ñeros que pasan que le ayuden a empujarlo. Un individuo flaco o huesudo le dice que mejor le preste la llave. Se la dá . Este se trepa y de una vuelta y un chispazo la nave da un arrancón.


ORIGINAL DE Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra
Nec spe, nec metu.
30 de marzo de 2011.
Estados Unidos Mexicanos.

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