PACO IBAÑEZ
PACO IBAÑEZ
Ayer tarde , descubrí un folleto programa que data de 1973 . Cuando Paco Ibañez se presentaba en México en el Palacio de Bellas Artes, ¡ esos tiempos ¡ .
En la portada se dibuja una silueta vestida en negro. En la mano sujeta una guitarra , la que le da fuerza . Apoya su pie sobre una silla y se da a la tarea de interpretar, a los poetas posibles . Desde Miguel Hernández con sus Andaluces de Jaén , hasta Pablo Neruda .
Paco Ibañez es uno de esos raros juglares que aún quedan , deambulando por el mundo y diciendo coplas , versos y palabras inteligentes a quién quiera escuchar .
Ahora 35 años más tarde , Paco al igual que yo estamos plenos de canas , claro yo soy más joven, y Paco lleva ya un largo camino .
Ayer , tuve en mis manos un DVD de Ibañez en El Palau de la música catalana , allá por los rumbos de Barcelona . Y lo ví , de distina manera , pasó ya el joven altivo , y ahora es un señor sumamente descriptivo , certero, hábil para decir palabras de antaño y palabras nuevas, sigue en su empeño de difundir a los poetas olvidados en los libros , de Quevedo al amado Federico García Lorca .
Empuña la guitarra nuevamente que nunca la ha podido olvidar . Sube nuevamente su pie sobre la silla y entona la mala reputación de George Bressens , Como tú de León Felipe o la canción de rey Almutamid , y a Galopar de Rafael Alberti .
Paco Ibañez es otro y es el mismo . El juglar y el cantor de la España de la esperanza , de la España de Antonio y Miguel , de Federico , la España de las guitarras y los versos entrañables.
Dejo la ideas y caigo en el sueño de los abismos, me voy con la idea de no despertar , caigo profundo y parece que estoy en los Ángeles . Un helicóptero vuela a cielo raso en busca de mí , llevo un niño entre los brazos . La nave intenta verme con su ojo de cíclope y me escondo entre unos arbustos que me causan unas heridas leves pero dolorosas . No debí cerrar los ojos , estaba mejor mirando el DVD . Ahora en que berenjenal estoy metido Dios mío ….
Despierto y en un estado de alteración me dirijo a los aparatos y pongo a Pavarotti , quién sin más canta Funiculi-funicula. Estoy en eufória . Tomo café y pasa el gato , vuela una mosca , tomo un puñal y que quito la vida….
Original de Alfredo Arrieta Ortega.
México.
Comentarios