casa en desorden,acostado, carretera y auto negro, en una población en brasil, mujer anciana con pájaros en los pies.
Casa en desorden,acostado, carretera y auto negro, en una población en brasil, mujer anciana con pájaros en los pies.
Por más intentos que hice nunca pude tener esta casa en orden.
Apenas la acababa de limpiar y.
Cuando me regresé a ver el trabajo anterior en el suelo había tirado virutas y azerrín.
Pienso que sí no hay ayuda de nadie ya no volvere a arreglar nada.
Así que decido no hacerlo y me echo en la cama.
Traigo puesta una bata de loco como esas batas que te ponen en los hospitales cuando te internan.
Estoy con las piernas levantadas y leyéndo un cuento de La Pequeña Lulú.
Entra una mujer gorda de pelo rubio. Es una mujer fea de rostro. Quién sabe como sea su interior.
La mujer me mira y exclama: Que huevotes¡
No entiendo sí lo dijo por mi desfachatez al no arreglar nada o porque en realidad echó un lente y vió mis enormes huevos. No lo sé.
Ahora voy en esta carretera. Es una carretera que tiene aceite. Los carros y camiones se derrapan. Voy con extremo cuidado no sea que de pronto me salga algún pendejo y me pegue.
Me detengo. Sube Esa mujer de quijada prominente llamada Lupita. Lleva a mi hijo pequeño. Le pregunto que sí hoy no vino nadie más con ellos?
No nadie más.
Un trailer se pega tanto a mí que me obliga a irme por la acera. La acera está muy maltratada.
Me encuentro en una población en el Brasil. Llegamos Fernando y yo a esta casa porque no tenemos en dónde quedarnos a pernoctar.
Nos recibe un brasileño que más bien parece africano.
Este cuate es compositor. Nos enseña sus canciones e incluso nos canta alguna.
Me pide que le dé una dirección a dónde mandarme lo que escribe.Tomo un papel y le escribo mis cuentas.
Afuera llueve. Desde que llegamos está lloviendo.
Nos dice que esta zona es así. Llueve de día y de noche.
Cuánta húmedad¡
Me pregunta que sí no sé cuando vendrán a Brasil Serrat , Ana, Víctor y Miguel. No lo sé,parece ser que en febrero y es seguro estarán en México con el Gusto es Nuestro.
Tú los irás a ver?
No. Los boletos son muy caros. Y me dá hueva el regreso de noche. Ah?
La lluvia arrecía, le pega a las ventanas que son de madera. La sala se inunda. Llegan personas, se sientan en los muebles mojados y comienzan a hablar. En portugués por supuesto.
Al otro día una señora como de noventa años camina al patio. Apenas alumbra el sol. La mujer tiene las piernas muy enfermas. Tiene várices, sus venas están moradas. Que dolores habrá de tener?
La mujer le dice a una niña que deje comer en paz a los pájaros. La niña trae uno en sus manos. La mujer le dice que lo deje en el suelo para que coma su alpiste. La niña lo deposita, el pájaro comienza a comer. El sol no calienta.No calienta nada...
Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra.
Nec Spe, Nec Metú.
29 de Diciembre de 2016.
Estados Unidos Mexicanos.
Por más intentos que hice nunca pude tener esta casa en orden.
Apenas la acababa de limpiar y.
Cuando me regresé a ver el trabajo anterior en el suelo había tirado virutas y azerrín.
Pienso que sí no hay ayuda de nadie ya no volvere a arreglar nada.
Así que decido no hacerlo y me echo en la cama.
Traigo puesta una bata de loco como esas batas que te ponen en los hospitales cuando te internan.
Estoy con las piernas levantadas y leyéndo un cuento de La Pequeña Lulú.
Entra una mujer gorda de pelo rubio. Es una mujer fea de rostro. Quién sabe como sea su interior.
La mujer me mira y exclama: Que huevotes¡
No entiendo sí lo dijo por mi desfachatez al no arreglar nada o porque en realidad echó un lente y vió mis enormes huevos. No lo sé.
Ahora voy en esta carretera. Es una carretera que tiene aceite. Los carros y camiones se derrapan. Voy con extremo cuidado no sea que de pronto me salga algún pendejo y me pegue.
Me detengo. Sube Esa mujer de quijada prominente llamada Lupita. Lleva a mi hijo pequeño. Le pregunto que sí hoy no vino nadie más con ellos?
No nadie más.
Un trailer se pega tanto a mí que me obliga a irme por la acera. La acera está muy maltratada.
Me encuentro en una población en el Brasil. Llegamos Fernando y yo a esta casa porque no tenemos en dónde quedarnos a pernoctar.
Nos recibe un brasileño que más bien parece africano.
Este cuate es compositor. Nos enseña sus canciones e incluso nos canta alguna.
Me pide que le dé una dirección a dónde mandarme lo que escribe.Tomo un papel y le escribo mis cuentas.
Afuera llueve. Desde que llegamos está lloviendo.
Nos dice que esta zona es así. Llueve de día y de noche.
Cuánta húmedad¡
Me pregunta que sí no sé cuando vendrán a Brasil Serrat , Ana, Víctor y Miguel. No lo sé,parece ser que en febrero y es seguro estarán en México con el Gusto es Nuestro.
Tú los irás a ver?
No. Los boletos son muy caros. Y me dá hueva el regreso de noche. Ah?
La lluvia arrecía, le pega a las ventanas que son de madera. La sala se inunda. Llegan personas, se sientan en los muebles mojados y comienzan a hablar. En portugués por supuesto.
Al otro día una señora como de noventa años camina al patio. Apenas alumbra el sol. La mujer tiene las piernas muy enfermas. Tiene várices, sus venas están moradas. Que dolores habrá de tener?
La mujer le dice a una niña que deje comer en paz a los pájaros. La niña trae uno en sus manos. La mujer le dice que lo deje en el suelo para que coma su alpiste. La niña lo deposita, el pájaro comienza a comer. El sol no calienta.No calienta nada...
Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra.
Nec Spe, Nec Metú.
29 de Diciembre de 2016.
Estados Unidos Mexicanos.
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